Uno de los heridos mas graves de aquella primera ola de violencia fue Odilo Alonso, un español que a finales de los años 50 emigro a Cuba. Le aconsejaron a Odilo que regresara a España cuando Castro confisco la finca donde trabajaba. Pudo hacerlo, pero dijo que, si Cuba le habia acogido como a un hijo, su deber era luchar por la libertad. Y tomo su fusil y se fue a las montañas de Escambray. Recuerdo al español Odilo Alonso, lo golpearon con saña en la cabeza, sangraba por los oidos [...] Odilo Alonso se desperto a la mañana siguiente con la cabeza monstruosamente hinchada, nunca hubiera imaginado que alguien podria haber parecido tan grotescamente deformado. Armando Valladares. Esta autobiografia es la denuncia en carne viva del regimen castrista y un terrible muestrario de vejaciones y maltratos. De igual modo es el triunfo de alguien que se tiene un gran respeto a si mismo.--Provided by publisher.

One of the most serious casualties of that first wave of violence was Odilo Alonso, a Spaniard who in the late 1950s emigrated to Cuba. They advised Odilo to return to Spain when Castro confiscated the farm where he worked. He could do it, but he said that if Cuba had welcomed him as a son, his duty was to fight for freedom. And he took his rifle and went to the mountains of Escambray. I remember the Spaniard Odilo Alonso, beat him in the head, bleeding from the ears ... Odilo Alonso woke up the next morning with a monstrously swollen head, never imagined that someone could have looked so grotesquely deformed. Armando Valladares. This autobiography is the denunciation in the flesh of the Castro regime and a terrible display of vexations and mistreatment. Likewise is the triumph of someone who has a great respect for himself--Provided by publisher.